miércoles, 7 de enero de 2015

Nutrición durante el embarazo

El embarazo


El embarazo es una etapa en la que hay una importante demanda energética y de calidad, con graves consecuencias para el desarrollo del feto, de no realizarse la alimentación de forma adecuada.


Son muchos los errores y mitos que rodean las recomendaciones alimentarias de la mujer gestante. No es verdad que se deba "comer por dos" Por el contrario, sí es cierto que una mala nutrición de la futura madre puede ocasionar problemas de prematuridad y mortalidad fetal, y que los estados de obesidad también pueden resultar peligrosos para la salud del futuro bebé.


Una de las características más significativas de un embarazo es la ganancia de peso. Es de todos conocido que cuando se ganan entre 12 y 14 kg de peso, se sufren una serie de trastornos patentes: cansancio, dificultad al respirar, dificultad para caminar, etc.



Estudio nutricional en el embarazo


Un buen estado nutricional es importante para un óptimo desarrollo de la gestación, por lo tanto, hay que hacer un control y seguimiento del estado nutricional de la mujer durante la gestación.


Habitualmente el encargado del control nutricional es el especialista en nutrición y el número de visitas durante un embarazo normal suele ser de una vez por trimestre. El especialista debe variar la pauta si hay razones clínicas que lo justifican.


Lo primero que hace el especialista en nutrición es la historia de la gestante. Esta historia se realiza en la primera visita al médico y al final de la misma éste tiene que conocer los siguientes aspectos:
Antecedentes familiares
Edad
Situación socio-económica
Factores que influyan en hábitos dietéticos: religión, costumbres, raza...
Antecedentes de enfermedad, drogadicción, tabaquismo...
Otros factores: consumo de fármacos con asiduidad, regímenes dietéticos, etc.
Número total de embarazos, intervalos entre ellos
Resultado de anteriores embarazos
Enfermedades congénitas y/o malformaciones
Administración previa al embarazo de suplementos vitamínicos u otro tipo de alimentos
Posibles perversiones del apetito (geofagia y otros)

El siguiente paso es realizar una encuesta dietética para valorar la ingesta y realizar los cambios necesarios.

Inspección física


Muchas carencias en estos metabolitos se pueden detectar con tan sólo una inspección ocular del pelo, encías, posibles manchas en la piel, piel escamosa, uñas blandas o con manchas y a veces quebradizas, labios con grietas, heridas que no cierran bien. Si desde el comienzo del embarazo ya se conoce una carencia es mucho más fácil resolverla o proceder adecuadamente.


La actitud con respecto a la ganancia de peso durante el embarazo, ha variado mucho en los últimos años. La mayor parte de los estudios corroboran que el aumento de peso durante el embarazo se relaciona con un aumento de peso del niño al nacer (National Center for Health Statistics, 1986), pero el aumento de peso debe ser controlado. Se establece que la ganancia total de peso, en un embarazo normal debe estar entre 11,900 kg y 15,900 kg.


Pero esta cifra se debe modificar según el peso de la madre al inicio de la gestación. Para aquellas que tienen bajo peso al inicio se recomienda una ganancia de 13 kg y 18 kg mientras que para las que tienen sobrepeso la ganancia recomendada es de 7 a 11 kg.


Adaptaciones durante el embarazo


Durante el embarazo se producen una serie de adaptaciones del metabolismo todas ellas dirigidas a una mejor utilización de los nutrientes por parte de la madre y del feto.


- Reducción del metabolismo basal. Es decir, para la misma actividad, el gasto es menor que antes de la gestación, para después ir normalizándose debido al anabolismo (proceso de creación de nuevos tejidos) existente.


- Capacidad de oxidar los ácidos grasos en los tejidos periféricos de forma que aumenta la disponibilidad de glucosa y aminoácidos para el feto y los tejidos placentarios sobre todo en el tercer trimestre, etapa de mayor demanda nutritiva fetal.


- Volumen y composición sanguíneos: El volumen sanguíneo se expande en un 50% lo que redunda en un descenso en los niveles de hemoglobina, albúmina y vitaminas hidrosolubles, mientras que aumentan las liposolubles y determinadas fracciones lipídicas.


- Cardiovasculares y pulmonares: Los requerimientos de oxígeno aumentan, con lo que aparece una necesidad mayor de respirar. El corazón sufre una leve hipertrofia cardiaca con aumento de la frecuencia del pulso.


- Gastrointestinales: Se da un aumento en la capacidad de absorción intestinal. Pueden aparecer vómitos, nauseas... Otras veces aumenta el apetito. Son frecuentes los antojos, las variaciones en las apetencias alimentarias.


-La sensación de náuseas es debida a los cambios hormonales y se produce en los primeros meses de embarazo. Normalmente, cesan al final del cuarto mes y no afectan al bebé, quien continúa creciendo. Puede tomar el desayuno en cama por la mañana, hacer comidas secas pequeñas durante el día (no consumir los líquidos junto con las comidas) y evitar cualquier tipo de intolerancia. Si sigue vomitando a menudo y con regularidad, es aconsejable consultar al médico.


-Acidez. En particular durante los tres últimos meses del embarazo, puede que el útero haga presión en el estómago, debido a su aumento en tamaño. Ello puede dar lugar al paso de ácido gástrico al esófago, produciendo una sensación irritante de ardor en la boca del estómago.


· Divida los alimentos en pequeñas raciones, distribuidas en todo el día.


· Coma despacio y mastique bien.


· Tenga cuidado con las especias, las bebidas carbonatadas, el alcohol, los alimentos grasosos, y cantidades excesivas de té o café.


· Un vaso de leche caliente puede aliviar un ataque de acidez.


· Espere al menos 2 horas antes de acostarse.


· Suba el nivel de la cama con un almohadón extra si sufre de acidez por la noche.


Estreñimiento. Es normal padecer de estreñimiento durante el embarazo, por lo que es importante tener una ingesta adecuada de fibra. La ingesta de comprimidos con altas dosis de hierro puede potenciar el estreñimiento. La fibra se encuentra en gran proporción en el pan integral, las verduras crudas, los cereales, las leguminosas y las frutas (especialmente aquéllas con cáscara). La fibra solamente surte el efecto deseado en combinación con líquido. Por ello, cuando se sigue una dieta rica en fibra, es importante beber mucho líquido, incluido en el agua, jugos de frutas, leche, té o café.


- Renales: Con el aumento del volumen sanguíneo aumenta la velocidad de filtración del glomérulo, pero probablemente debido a la ausencia de adaptación total hay una pérdida por orina de nutrientes, proteínas, vitaminas, etc., que no se da en no embarazadas.


Necesidades de nutrientes.


Energía


El coste energético durante todo el periodo de la gestación está calculado entre 75.000 y 80.000 kcal, lo que aumenta las necesidades en unas 150 kcal diarias en el primer trimestre del embarazo y en 340 kcal en los trimestres restantes.


Parte de esta energía es almacenada en forma de depósitos de grasa que constituyen un mecanismo de protección del feto frente a un posible estado de déficit al final de la gestación o durante la lactancia.


Vitaminas Hidrosolubles


Vitaminas Liposolubles



Calcio y Fósforo

Se pretende cuidar los depósitos de la madre y aumentar la disponibilidad para el feto, que durante la última etapa del embarazo consume del orden 200-300 mg/día. Las recomendaciones de algunos países establecen la ingesta, durante el embarazo, en 1200 mg/día, para cada uno de ellos.


Fuentes de calcio: Productos lácteos, salmón, sardinas, grano de soja, levadura de cerveza, semilla de sésamo, almendras, germinados, algas, col rizada y berza.


Hierro


Se ha calculado que durante la gestación las necesidades de hierro son de 0,9 mg/día durante el primer trimestre, 4,1 mg/día durante el segundo y 6,2 mg/día durante el tercero. Es importante señalar que, durante el periodo de gestación, la capacidad de reabsorción de hierro por parte del intestino aumenta aproximadamente en un 40%, por lo que las pérdidas disminuyen de forma importante. Este mejor ajuste hace que no sean necesarios grandes suplementos, sobre todo en mujeres con unos depósitos de hierro buenos al inicio del embarazo, y que sigan una dieta completa y equilibrada. Sin embargo, ocurre que las mujeres en edad fértil, sobre todo de sociedades desarrolladas, suelen tener reservas muy pequeñas de hierro. Por este motivo, necesitan con frecuencia aportes externos, al no ser posible cubrir las necesidades totales de hierro con la cantidad procedente de la dieta.


Combinar los alimentos ricos en hierro con vitamina C aumenta la absorción del hierro. Evita beber té o café durante las comidas, o inmediatamente después de ellas, puesto que inhiben la absorción del hierro.


Fuentes: Carne de ternera, sardinas, huevos, fruta seca (especialmente los higos, las ciruelas y los albaricoques), almendras, levadura de cerveza, cacao, pan integral, germinados, remolacha, brécol, verduras de hoja verde y algas.


Acido fólico. Relacionado con la aparición de espina bifida. Suplementar durante el embarazo, recomendable comenzar antes del embarazo.











Necesidades de la mujer gestante según el trimestre de embarazo

Necesidades nutricionales
Primer trimestre
Segundo y tercer trimestre
Alimentos de especial interés para cubrir necesidades
Energía
Normal
Aumentar a partir del cuarto mes: 100 a 300 kcal/por día suplementarias
Alimentación equilibrada aumentando el consumo de alimentos plásticos y reguladores
Proteínas
Normal
Aumentar a 1,5 los g/kg/día. De ato valor biológico
  • Lácteos
  • Cárnicos
  • Legumbres
  • Cereales   integrales
  • Frutos secos
Glúcidos y lípidos
Normal
Normal. Atención a los azúcares y a las grasas de origen animal
  • Cereales, pan integral
  • Legumbres
  • Fruta
  • Patatas
  • Mantequilla
  • Aceite de oliva y de semillas
Elementos químicos esenciales
Normal
Especial atención al calcio, fósforo, yodo y magnesio y en el tercer trimestre al hierro
  • Carnes rojas
  • Lácteos
  • Pescado o sal yodada
  • Legumbres y frutos secos
  • Verdura de hoja verde
Vitaminas
Aumentar C, B, ac. Fólico, A, D y E.
  • Fruta y verdura fresca
  • Pan integral
  • Lácteos
  • Mantequilla y aceites
  • Verdura de hoja verde
Agua
Normal
La demanda fisiológica de 2-2,5 l diarios, se debe aumentar a 3 litros
  • Agua
  • Bebidas naturales
  • Evitar alcohol y bebidas estimulantes
Fibras
Aumentar el consumo para combatir el estreñimiento
  • Frutas con pulpa
  • Verdura en general
  • Ensaladas
  • Cereales integrales








Tabla de pesos netos de las raciones individuales de alimento para gestantes-lactantes:
Alimentos
Peso de ración recomendada
Lácteos
Leche o yogurt
Requesón o quesos frescos
Queso (semicurado)
300 ml
60-100g
70g
Carnes y equivalentes
Carnes
Pescados
Jamón cocido
Huevos (50-60g)
Pollo (1500g)
160g
200g
160g
2 unid
3/8
Farináceos
Pan integral
Arroz o pasta (crudo)
Patatas
Legumbres
60g
70g
300g
60g
Frutas
En general
200g
Verduras
En general
250g
Grasas
Se considera que cada comida importante (almuerzo o cena), puede incluir 20-30 g de materia grasa, si no hay contraindicación personalizada.

Menú tipo que puede orientar para organizar la dieta durante el embarazo:
Desayuno
Cereales
250cc de leche entera
300 gr. de fruta
Media Mañana
Pan integral, jamón, fruta
Almuerzo
Pasta (1 vez por semana)
Arroz (1 vez por semana)
Legumbre (1-2 veces por semana)
Verdura (2-3 veces por semana)
Carne, pescado o huevos (2) (todos los días) Guarnición vegetal
Frutas (cruda) (todos los días)
Merienda
Yogurt o preparado lácteo Pan, queso y fruta
Cena
Fruta
Al acostarse
Leche o producto lácteo equivalente
Se recomienda: utilizar aceite de oliva, no cocinar con frituras ni salsas complejas (natas y derivados)




 Bibliografía: http://www.uned.es/pea-nutricion-y-dietetica-I/guia/etapas/embarazo/index.htm



Retraso del crecimiento infantil



Definición de retraso de crecimiento: Se refiere a cualquier niño, que esté considerablemente por debajo de la estatura promedio para un niño de la misma edad y sexo.  El término con frecuencia se refiere a niños o adolescentes que se encuentren significativamente por debajo de la estatura promedio de sus compañeros


Para determinar que un niño tiene un retraso en su crecimiento debemos comprobar: 
  • Que tenga un peso por debajo de los límites normales para su edad. 
  • Curva de peso decreciente: aquellos niños que desciendan dos percentiles debajo de su curva normal de crecimiento deben estudiarse aunque su peso siga estando dentro de los límites de normalidad. 
  • Mantenimiento de este déficit de peso al menos durante dos meses si se trata de un lactante menor de 5 meses o durante tres años si es mayor de esta edad.

Causas del retraso de crecimiento

Clásicamente se habían clasificado las causas de retraso de crecimiento como orgánicas y no orgánicas: 

Orgánicas

  1. Existe una causa del retraso: 
  2. Ingestión inadecuada de alimentos, desnutrición. 
  3. Anorexia
  4. Digestión o absorción defectuosa de los alimentos 
  5. Pérdidas excesivas de nutrientes 
  6. Celiaquia. 
  7. Pubertad precoz. 
  8. Enfermedad crónica de base (cardiopatía, enfermedad renal, enfermedad hepática...). 
  9. Enanismo hipofisario, Déficit de hormona de crecimiento.
  10. Hipotiroidismo. 
  11. Exceso de glucocorticoides, habitualmente secundario a terapias con dosis farmacológicas de glucocorticoides que disminuyen la secreción de hGH, El retraso de talla habitualmente es la primera manifestación y a veces la única; posteriormente aparecen obesidad, hipertensión arterial, facies de luna, distribución de grasa troncal, atrofia muscular y de piel, entre otros. 
  12. Enfermedades constitucionales óseas. 
  13. Retraso constitucional del crecimiento y de la pubertad (RCCP) Se caracteriza por una evolución retrasada en la estatura y el desarrollo puberal, generalmente con antecedentes de otros miembros de la familia. 
  14. Talla baja familiar o genética. Se trata de niños con antecedentes de talla baja en su familia, con una somatometría normal al nacimiento y que de manera precoz, ya en los dos primeros años de vida, presentan una desaceleración de su velocidad de crecimiento.

No orgánicas

  1. Crecimiento anormal sin enfermedades identificables que lo causen. 
  2. Carencia afectiva: Este cuadro fue inicialmente descrito en niños internados en hogares institucionales u orfanatos, que presentaban un grave retardo de crecimiento a pesar de tener un aporte nutricional adecuado y ninguna causa orgánica pesquisable. Se ha planteado la existencia de un mecanismo psiconeuroendocrino, que involucra corteza, hipotálamo e hipófisis. 

Los factores de riesgo son: 

  • Niños difíciles, enfermizos, con trastornos de sueño. 
  • Madres agobiadas y padres emocionalmente incapaces de soportarlo. 
  • Trastorno o desorden en la situación alimentaria. 
  • Entorno social de estrés o pobreza. Otros: exposición a tóxicos (tabaco, alcohol o drogas) durante el embarazo, niños prematuros

Niños celíacos


¿Qué es la enfermedad celíaca?

La enfermedad celíaca es  una intolerancia (que no alergia)  permanente al gluten ). Esta proteína altera de forma grave la mucosa del intestino produciendo atrofia de las vellosidades y mala absorción de nutrientes. Entre otros síntomas, la intolerancia al gluten puede provocar.pérdida de peso, retraso en el crecimiento de los niños, alteraciones del carácter, vómitos y diarreas.

El gluten es la proteína que se encuentra en los cereales como la avena, cebada, centeno y trigo. Es importante conocer que esta enfermedad no dispone de un tratamiento específico, sino que éste reside en excluir estos cereales de la dieta. Por lo tanto, la dieta sin gluten debe de seguirse de por vida.

  • Alimentos prohibidosCereales (trigo, cebada, centeno y avena) y sus derivados, como la harina, almidón, pastas alimenticias, pan, etc. Es importante tener en cuenta que algunos medicamentos, pastas de dientes o cosméticos también pueden incluir gluten, harinas, almidones u otros derivados para la preparación de sus excipientes. Por ello, resulta imprescindible para los celíacos leer previamente el prospecto y asegurarse de que el fármaco no contiene gluten. En caso de duda, consultar siempre con el médico o farmacéutico.
  • Alimentos permitidos: La dieta sí puede incluir maíz, arroz, amaranto, quinoa, sorgo, cassava, yuca, mandioca y aquellos alimentos que en su origen no contengan gluten: carnes, pescados, huevos, leche, legumbres, tubérculos, frutas, verduras, hortalizas, grasas comestibles y azúcar.  También se fabrican algunos productos especiales sin gluten, totalmente aptos para celíacos (pan, bollería, pastas italianas), donde se debe indicar expresamente que se han elaborado sin gluten.


Consejos a la hora de cocinar para intolerantes al gluten:

  • Evitar cocinar alimentos sin gluten en aceites donde, previamente, se hayan frito productos que sí lo contienen (por ejemplo, carne o pescado empanados).
  • Utilizar copos de puré de patata para rebozar, empanar o espesar salsas, sustituyendo las harinas de los cereales.
  • Para evitar una contaminación cruzada, los alimentos libres de gluten no deben entrar en contacto con ingredientes que sí lo contengan.
  • El pan sin gluten debe ser tostado en una tostadora diferente a la del pan con gluten.
  • Condimentos como mayonesa, mermelada o margarina, no deben contaminarse con cuchillos o cucharillas que contengan restos de otros productos con gluten.


5 Consejos para una Navidad cardiosaludable



Esta entrada llega un poquito tarde, pero es mejor que nunca. Esta vez, la voy a dedicar a estas fechas tan señaladas, que son conocidas entre otras razones, por el considerable aumento de peso que a algunos ocasiona. 

Las comidas y cenas que se realizan en Navidad no resultan del todo saludables, ya que debido a las tradiciones y costumbres (diferentes en cada país), los alimentos tienden a ser más bien grasos. Como es el caso del cordero, del foie, salsas varias etc.

Sin embargo, aquí van algunos consejitos para mantener el motor del cuerpo lo más saludable posible:

1.- No ingerir comidas abundantes y aprender a parar.  Esto consiste en comer lo que nos guste, pero siempre con moderación, evitando los excesos. En estas fechas en las que cambian las rutinas y el corazón se somete a más emociones y tensiones de lo habitual, lo ideal es procurar no abusar de alimentos ricos en grasas que aumenten los niveles de colesterol.
2.- ¡ Cuidadito con el alcohol! Con ello no niego la evidencia de que el dosis moderadas de cerveza o vino resultan beneficiosas para nuestras arterias. Pero con dosis moderadas me estoy refiriendo a 1 copa de vino o cerveza al día en mujeres y 2 copas en hombres. Aun conociendo la teoría adecuada, es obvio que en estas fechas, cuando esta teoría se lleva a la práctica es difícil quedarse en la primera copa o en la segunda copa para muchas personas, sobretodo a la euforia de las fiestas.  Pero no hay que olvidar que dosis elevadas de alcohol en sangre son perjudiciales para nuestra salud en lo que se refiere a múltiples órganos de nuestro organismo.
3.- Volver cuanto antes a las rutinas. Pasados los días más señalados, conviene regresar a la dieta mediterránea  (o equilibrada) incorporando alimentos bajos en grasas saturadas, colesterol y sodio. Además de la dieta, hay que tener en cuenta el ejercicio físico que se realice diariamente, como pueden ser las compras, la limpieza del hogar, el trabajo, el gimnasio...e intentar volver a él lo más rápido posible. Esto evitará un posible aumento del peso. 
4.- Vigilar el peso. Se calcula que durante estas fechas cada español engorda entre dos y tres kilos. Volviendo a unas rutinas cardiosaludables que incluyan la práctica diaria de ejercicio podremos volver a deshacernos de ellos, pero lo ideal sería no aumentar nuestro peso.
5.- Intentar descansar adecuadamente. El descanso es esencial para el corazón, pero en estas fiestas suele verse alterado. Según un estudio publicado por European Journal of Preventive Cardiology, dormir entre siete y nueve horas al día reduce hasta en un 65% el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, mientras que dormir poco se asocia con problemas de sobrepeso, hipertensión o colesterol.